Ya no tiene sentido decir “vivan los novios” porque no quedan novios, y el noviazgo pasó a la historia. Ahora lo que se llevan son los follamigos. Es decir el compañero –a ser posible mudo- de una noche loca o un achuchón, sin preguntas, ni palabras. ¿Tiene eso algún futuro? Veamos
La ciencia demuestra que están condenados al fracaso los ligues ocasionales o el sexo sin compromiso, e incluso sin comunicación –sin querer saber nada del otro, no vaya a ser que te enamores-. Es lo que ahora se llama “follamigos” o “amigovios”(Artículo de El Mundo).
En cambio lo que sí funciona, lo que nunca falla, es el noviazgo clásico de toda la vida. El noviazgo concebido como una etapa previa al matrimonio, una etapa de preparación y conocimiento, estimulante y exigente, donde calibras si esa es la persona adecuada para pasar con ella el resto de la vida. Solo que ahora el noviazgo parece haber desaparecido del mapa sentimental y ha sido sustituido por otras cosas que no tienen nada que ver.
El noviazgo no es:
- “Un intercambio de fluidos”. La frase es de Woody Allen y refleja gráficamente ese sexo sin compromiso, ciego y sin preguntas… que se agota en sí mismo, que dura lo que dura el caramelo, y que te deja hecho un trapo.
- Un pasatiempo decorativo. Como su mismo nombre indica es una pérdida de tiempo. Y raramente inocua: puedes dejar algún que otro corazón destrozado.
- Un postureo para presumir de tipa, o de Tarzán. Sin comentarios.
- Una sucesión de ligues ocasionales. Algunos/as buscan al hombre o la mujer perfecto, y como no lo encuentran consumen su edad núbil en ‘cienes’ de relaciones.
- Irse a vivir juntos sin ataduras ni compromisos. Eso no es un noviazgo, porque no es la preparación de nada sino una probatina indefinida. Pero tampoco es matrimonio porque no hay una declaración pública y expresa de vida en común y de formación de una familia. Y como no hay reglas, todo vale… lo cual genera una tremenda desconfianza (¿cuándo me abandonará…?). La Real Academia debería inventar un término nuevo para definir ‘eso’: no sé, ¿novimonio?
- Marear la perdiz para ganar tiempo sin renunciar a afectos esporádicos con los que hilvanar mi vida sentimental. Un intento de retrasar la edad del matrimonio, a ver si llego a la jubilación y me libro de esa carga. Propio de ‘peterpanes’ y -cada vez más- de “pedritas panes”.
Ninguna de estas modalidades de engañarse a sí mismo es noviazgo. ¿Qué creéis vosotros qué es el noviazgo? Se admiten sugerencias.